Los
Secretarios Particulares según estudio de la primera edición del Libro Los
Secretarios Particulares de los autores Oscar Méndez Orihuela y Alfonso Araujo
López, clasifican sus características generales en diferentes tipos de
caracteres, talentos y temperamentos.
Características
generales:
Los
Secretarios Particulares, en su gran mayoría actúan con un conocimiento pleno
de las funciones que realizan, y que los adelanta a los acontecimientos. Actúan
con la prudencia del caso ante los hombres y mujeres que atienden. Son
adiestrados en el manejo administrativo de su área. Por lo regular son amables,
se distinguen por su seriedad en el
trabajo en que aman el orden y la regularidad. Sus posiciones son la
antesala del poder que ejercen con la formalidad y discreción de cada cual.
Asumen sus funciones con inteligencia par conseguir posteriormente su
ascendencia y acrecentar su prestigio. Actúan regularmente con astucia y
eficiencia. Los menos son audaces practicantes de la actividad de las
relaciones públicas. Son capaces de comunicarse con el resto de su entorno sin
establecer barreras con sus características de personalidad o con sus
actuaciones autoritarias. Son personas confiables en las que se deposita la
secrecía en asuntos privados y oficiales. Algunos conocen las triquiñuelas del
poder y de la negociación. Regularmente evitan contar con zalameros, con
socarrones y con charlatanes a su alrededor. Cuentan con la experiencia
profesional en su función, se manejan con planeación y resultados. Son discretos
y eficaces. Disfrutan de alta consideración, estiman su cargo. Son exigentes
consigo mismos. Son firmes en la adversidad y de fuertes convicciones. Gozan de
verdaderas fuentes de información, gracias a su estratégica posición. Son
ambiciosos, pacientes, previsores, tolerantes y ejecutivos. Son íntegros,
dedicados y sensibles en sus tareas. Son ideales en grado de confianza. Son
personajes de la vida pública y privada, con grandes responsabilidades que los
llevan a atender a grandes personajes políticos y privados. Son personas
seguras que confían en sí mismos. Son persuasivos y tienen una capacidad de ser
prácticos, con dotes de organización. Se toman en serio las cosas aunque sean
de pequeña importancia.
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