EL SECRETARIO PRIVADO

La palabra secretario proviene del latín “secretarius”: dícese de  la persona a quién se comunica algo que no debe trascender a otras.

Secretario personal, fue el nombre original con que se conoció a las personas encargadas de los asuntos no oficiales de otra que detentaba un cargo oficial.

Secretario personal, desde el matiz social, brinda una atención puntual, se convierte en un talentoso publirrelacionista y soluciona en la manera de lo posible las peticiones concretas. Su ámbito es empresarial y/o personal.

Pero cuáles son sus funciones:

·         Coordinar la agenda pública y privada.

·          Informar acerca de los eventos donde se debe presentar.

·          Tomar nota de las gestiones que se le encomienden.

·         Trazar las rutas de logística para el traslado a los eventos oficiales y/o privados.

·          Coordinar con el personal de asistencia en campo, la agenda del día para conocer los compromisos y programar las salidas.

·         Realizar las diligencias personales que le sean encomendadas.

·          Verificar que los vehículos personales cuenten con los servicios de mantenimiento correspondiente.

·         Llevar a los eventos oficiales donde se estará presente;

·         Actualizar el directorio telefónico de funcionarios públicos y privados.

·          Atender a la  audiencia privada en ausencia.

·         Contar con la   información de cada evento público y privado

·          Proporcionar alimentación, así como medicación  siempre cuidando la integridad con respecto a su salud.

·          Redacción y elaboración de oficios, notas, memorándums.

·           Informar de las actividades ordinarias y extraordinarias dentro de su círculo cercano (familia).

·          Efectuar las gestiones; para la adquisición de viáticos para viajes ordinarios y extraordinarios que se necesite.

·          Las demás funciones inherentes a su puesto o las que en su caso se le asigne.